UN CAFÉ CON FAUSTINO MATÍAS

Es una persona luchadora, de la vieja escuela, que se caracteriza por su capacidad de trabajo, su compromiso con la calidad y su honestidad en la relación con clientes y proveedores, todo ello le define como persona y como profesional.

INTERBRIQUES S.L. es de esas empresas que puedes recomendar con tranquilidad, porque sabes que es fiable y cumple con su palabra. Os dejamos una entrevista con un toque muy personal, donde pone toda su experiencia de vida para aquellos que quieran escucharla sin medias tintas.

Buenos días Faustino, ya sabes cómo empezamos. Cuéntanos quién eres, cuál es tu perfil y a qué se dedica tu empresa.

Mi empresa se llama Interbriques, S.L., yo soy el gerente y propietario y mi formación es aparejador. Llevo toda la vida en la construcción, pero hemos trabajado desde muchos ángulos distintos, desde la compra de suelo, hacer el proyecto, construirlo y venderlo. Además, en este momento estamos muy implicados con un sistema constructivo que hemos diseñado y patentado que se llama AISLABRICK.

¿Y cómo está recibiendo el mercado un producto tan novedoso y tan bien pensado como AISLABRICK? No hay que olvidar que es un sistema constructivo distinto, lo que, en este sector, puede ser difícil de digerir y entender.

Fundamentalmente nuestro sector es inmovilista, no es fácil introducir conceptos nuevos. Pero también es cierto que las exigencias en materia de eficiencia energética y constructiva están obligando a que se produzca el cambio, es una evolución necesaria.

Además, hay una variable añadida que nos obliga, y es la falta de mano de obra cualificada, que hace insostenible la obra tradicional tal cual ha funcionado hasta ahora.

En cualquier caso, no debemos olvidar que este cambio de mentalidad en España que poco a poco ha ido calando, en Europa lleva años de desarrollo, es decir, no estamos inventando nada nuevo.

¿Qué ventajas tiene un producto industrializado como AISLABRICK, Faustino?

Los sistemas industrializados como el nuestro tienen muchas ventajas:

ASILABRICK es un Sistema Modular Industrializado de Fachada Ligera autoportante, a base de paneles con Altas Prestaciones Térmicas, que puede incorporar diferentes acabados exteriores, entre ellos el revestimiento exterior de fachada ventilada.

Las piezas son fabricadas en un entorno seguro, certificado e independiente a las condiciones climáticas del exterior. Esto minimiza el riesgo laboral del trabajador, incrementa la calidad del producto, asegura una puesta en obra limpia y rápida, obliga a una mayor planificación que evita muchísimos errores posteriores que exijan una solución improvisada, la propia eficiencia del material como aislante, etc.

Es que, en mi opinión, son muchas las ventajas respecto a una obra tradicional, pero yo destacaría una más; el ahorro en el tiempo de ejecución de la obra, que muchas veces no lo tenemos en cuenta porque estamos acostumbrados a que duren lo que tengan que durar, pero implica un ahorro en costes, en eficiencia y en satisfacción del cliente.

Faustino, conocemos algún caso cercano que han querido hacerse una segunda vivienda con un sistema industrializado, pero que les ha resultado muy difícil, justamente por la velocidad con la que se ejecuta, porque deben financiar una parte importante de la construcción en un plazo muy corto de tiempo y son gente que no dispone de la liquidez o el ahorro necesario para poder abonar un porcentaje tan alto de la vivienda en tan corto plazo de tiempo.

Algo que debería ser positivo por su eficiencia se puede convertir en una limitación….

Yo creo que los bancos se están dando cuenta de que ellos deben acompañar el cambio, la evolución que el sector necesita tiene que ir de su mano, que una obra que antes duraba 18 meses ahora dura 8 meses, y que la financiación debe acompañar a los nuevos tiempos de ejecución.

Ya hay bancos que están empezando a buscar soluciones a este problema.

Generalmente la innovación y el cambio requieren de un periodo de transición y, en este caso, el sector financiero debe entender el papel tan importante que tiene en este asunto.

Así que el enfoque está cambiando….

Yo creo que son dos conceptos a los que atender, uno de ellos es el prefabricado que sale terminado de fábrica y, otra cosa es el sistema de edificación industrializada, que es el que nosotros gestionamos que tiene aplicación en viviendas unifamiliares y plurifamiliares en altura.

Ten en cuenta que lo que estamos haciendo es, en una única unidad de obra hacer 3, la envolvente, el aislamiento y los huecos de fachada y dejamos todo listo para ir detrás cerrando con pladur y acabando la fachada.

¿Tenéis más sistemas o más aplicaciones?

Sí, ese es uno de nuestros sistemas, en otro podemos hasta incorporar la estructura en viviendas de hasta 1 o 2 plantas, por ejemplo.

Cuando conocimos vuestro sistema, nos gustó mucho una de las aplicaciones para aquellos que no quieren renunciar al hormigón, ya que el propio sistema se puede utilizar como encofrado permanente.

Sí, esa es una de las posibilidades, es verdad que podemos hacer funcionar el cerramiento como un encofrado perdido, pero ahí ya hay que hormigonar, etc., nuestra intención es hacer cuanta mayor parte de la obra en seco mejor.

Pero tenemos más, porque por otro lado está el SATE. El nuestro es un SATE hecho a medida, para ello fabricamos las piezas a medida de la fachada, lo cosemos y prácticamente está terminado, es decir, no hay que pasar por todo ese proceso de, primero coloco el aislamiento, luego le doy una mano, luego otra mano, etc.

¿Cuesta vender este tipo de sistemas?

Cuesta, claro que cuesta, es que siempre vamos al tema precio ¿pero con qué comparamos estas cosas?

En verdad, la comparativa no es el problema, el problema es si se están introduciendo todos los elementos en esa comparativa.

Es decir, no es solo el precio por metro cuadrado de bloque de termoarcilla colocado. Si hablamos de nuestro sistema para fachadas, no es lo mismo tener los andamios colocados en la fachada durante 3 meses que si lo hacemos nosotros con una tijera, dejándola terminada en mucho menos tiempo, pero, sobre todo, ofreciendo unos acabados de muchísima más calidad que los SATES tradicionales.

¿Qué durabilidad tiene un AISLABRICK?

Ten en cuenta que nuestros SATES están acabados sobre una placa ignífuga sobre la que se puede dar cualquier tratamiento, o una cerámica, fibrocemento, piedra natural, lo que quieras.

 ¿Cómo crees que ha evolucionado el sector en los últimos años?

Yo diría que hemos pasado de trabajar como en el tiempo de los Romanos a trabajar en seco, antes era amasa y pega y ahora es atornilla.

Faustino, ¿tienes algún error reseñable que hayas cometido en todos los años que llevas gestionando una empresa y emprendiendo infinidad de proyectos?

Mi mayor error es no haber planificado desde hace muchos años la continuidad del negocio, organizarme de manera que esta empresa tuviera una continuidad, es más, creo que este es el problema de muchos empresarios de mi generación.

Vemos que es muy difícil que puedan continuar, incluso siendo empresas rentables y con futuro.

¿Cuál crees que es el problema? ¿Por qué sucede?

Yo creo que las nuevas generaciones valoran otras cosas, que no son ni el esfuerzo, ni el trabajo, ni la responsabilidad o el compromiso, tampoco tienen ambición por prosperar, su objetivo es vivir bien y ser felices. Creo que ellos han nacido con un pan debajo del brazo, han vivido mejor y han tenido otras posibilidades.

Obviamente no quiero generalizar, habrá de todo, pero esta mi experiencia, yo creo que el propio sistema contribuye a que esto sea así.

Yo recuerdo una frase que me decía mi padre “Tú tienes que ser más que yo” pero hoy parece que el paradigma es ser feliz (pero sin aclarar bien cual es el concepto de la felicidad).

Yo vengo de una familia de taberneros, me crie en una taberna, estudié mi carrera encargándome de abrirla a las 06:00 de la mañana. De ahí que yo no sepa vivir sin esforzarme, sin trabajar, sin arriesgar porque es lo que he mamado, lo que me han enseñado.

¿Dónde soléis trabajar, Faustino? ¿Abarcáis todo el territorio nacional?

Por una serie de circunstancias, personales y de amistad, y por las consecuencias del volcán, estamos enviando viviendas a la Palma, en las Islas Canarias.  Estamos enviando allí viviendas en contenedores de 40 pies, y las construyen rápido. Allí no prima tanto la eficiencia energética, sino la necesidad de ser eficiente en la construcción.

Hay mucha necesidad de vivienda, lo que sorprende es que las autoridades y los políticos no sean capaces de entender que no se puede tener a la gente viviendo en barracones de chapa, que hay soluciones industrializadas rápidas suficientemente económicas, lo único que hay que tener voluntad y querer hacerlo.

¿Qué es para ti Espacio ShoWorking, tú que llevas tantos años con nosotros?

Es una ventana que aporta mucha luz, una posibilidad que bien llevada tiene un gran futuro, creo que es una buena iniciativa que puede reportar beneficios a todos los que participamos en el sector de la construcción. Hemos sido muy francotiradores, y yo probablemente de los que más, pero conviene aprender, sintonizar, colaborar unos con otros.

¿Cuál ha sido tu mayor desafío de coordinación, tu obra más compleja?

Yo he hecho de todo, pero sobre todo he construido viviendas, pero sinceramente lo peor de todo, lo más complicado, es asumir la burocracia, la guerra administrativa con los ayuntamientos, con el entorno político, es lo que más nos ha frenado, y en este momento ni te cuento, cada vez peor.

Creo que ni los técnicos ni los políticos son conscientes de la necesidad de agilizar las cosas, falta mucho sentido común. Si lo que queremos es complicar las cosas pero que seamos todos felices, mejor cerramos, nos vamos todos a casa y felices todos, pobres pero felices.

¿Cuál es la diferencia entre trabajar con un equipo bien conectado y uno donde no exista la comunicación?

Fundamental, el 90% de mis empleados lleva conmigo más de 25 años, lo que generas es una familia, hay que hacer que tus empleados entiendan que el negocio también es suyo, es fundamental.

Además, en las empresas pequeñas como nosotros, que todo el mundo sepa lo que hacemos los demás, es otro factor importante. Hemos creado una especie de escuela interna que nos ha funcionado muy bien.

Faustino nos has contado algo que no sabíamos, que eres una especie de Julio Iglesias y no por cantar…¿Qué nos puedes contar de este rumor?

Bueno sí, he hecho muchas cosas en mi vida, esto es un secreto que no había compartido. Cuando era más joven jugué en el Real Madrid juvenil y tuve la suerte de jugar con Gento, Amancio, Velázquez, y toda aquella generación, pero me lesioné y tuve que dejarlo, alguna foto conservo por ahí.

Por finalizar Faustino, ¿quieres decir algo antes de acabar la entrevista, algo que remarcar?

Yo creo que es importante que tomemos conciencia de la realidad, que no vivamos en una nube, que creo que es algo que está ocurriendo en los últimos años en la sociedad, que no somos tan ricos como nos creemos, que tenemos que trabajar.

A mí me da mucha pena que en mi empresa solo hay dos españoles trabajando, que llevan conmigo muchos años y el resto son inmigrantes, con 15 y 20 años en la empresa.

¿Qué pasa en este país con la gente joven?

Porque he intentado que entrara gente, pero duran poco, se van, duran dos días, españoles que ni han estudiado, ni han trabajado nunca.

Tenemos que reaccionar como sociedad, como país.